-Moda sostenible. Trucos para que no te engañen-
Cada vez somos más las personas que tomamos conciencia de la necesidad de adquirir hábitos tengan un afecto positivo y permitan el equilibrio de nuestro planeta. Las marcas de moda y complementos cada vez hacen más esfuerzos para ser más ecológicas bajo las etiquetas de Slow fashion, joyería ética, moda ecológica, moda sustentable, moda saludable, moda lenta o moda ética. Pero ¿Qué claves debemos saber para identificar la auténtica moda ética?
En este artículo vamos a explicarte el verdadero significado de la moda sostenible y qué claves podrás tener en cuenta a la hora de decir no al fast fashion. ¿Quieres descubrirlo? ¡Te lo contamos todo!
Seguro que ya te suena el concepto de moda sostenible y tienes una idea aproximada de lo que es: una alternativa saludable a la moda convencional, que aúna cuidado medioambiental, respeto de los derechos humanos de trabajadores y trabajadoras, y protección de la salud al elaborarse con materiales naturales libres de componentes tóxicos. ¡Todo ello, en un solo producto!
Podríamos decir que la moda sostenible implica el uso de prendas o complementos que poseen criterios de valor, valores que sólo podemos conocer si las marcas son transparentes, ¡Nos contarán toda la verdad de lo que hacen! De esta forma podremos identificar todas las claves de si la moda que ofrecen es sostenible:
1. Moda con impacto positivo y economía circular
Trabajan siempre con el propósito de minimizar el impacto medioambiental para preservar y mejorar la salud del planeta. ¿Cómo lo hacen? Incluyendo productos creados a partir de materias primas y métodos que respetan el planeta, el reciclaje de otras materias o upcycling y la recuperación de moda y accesorios vintage.
Además es indispensable que incorporen a sus procesos la economía circular, procurando reutilizar materiales y servicios sin perder de vista algo muy importante: La economía circular no es solo reciclar: También es cambiar el modelo de negocio y plantear nuevos esquemas de consumo pensando siempre que los recursos son finitos.

2. El respeto a las personas es esencial
En la moda sostenible el respeto a las personas es una parte esencial: los trabajadores y trabajadoras deben tener unas condiciones dignas de empleo y crear una marca que favorezca la economía y producción local, así como la recuperación de empleos.
De esta manera si una marca controla todo el proceso de diseño, fabricación, transporte y comercialización de sus productos podrán garantizar que se cumplan los derechos laborales del comercio justo.
3. Emplean materiales naturales y orgánicos (o reciclados)
La moda sostenible debe incorporar necesariamente materiales naturales y orgánicos o bien reciclados. Además de saber qué materias primas se han empleado será casi igual de importante conocer su procedencia. Entre dos prendas distintas elige aquella realizada con tejidos orgánicos como el algodón orgánico, el tencel, el bambú o el cáñamo; o tejidos reciclados, telas que han sido obtenidas de restos de stocks o de otras prendas existentes que ya nadie quería. Si compras artículos de madera procura que sean de madera reciclada y con el sello de madera justa para asegurarte de que no se talan más árboles para su producción. Este último caso es el de Monkey Wood, donde todas las joyas están hechas con madera justa de árboles sin talar, ¡Descubre sus joyas para amantes de la naturaleza!
Sostenibilidad implica usar materiales pensando no solo en reducir el impacto negativo en nuestro planeta, sino en aportar un impacto positivo. Tejidos orgánicos, compostables, reutilizados o creados a partir de deshechos. Será importante también el uso de tintes naturales y de procedencia vegetal para garantizar los derechos de los animales.
Pero, ¡CUIDADO! No siempre que un material parece ‘ecológico’ lo es. Es el caso por ejemplo, del bambú: crece muy rápido, pero a veces se cultiva con pesticidas y luego se trata con sustancias químicas para convertirlo en tejido o accesorios. Para asegurarnos de que un producto sea sostenible lo mejor es, observar si posee un sello de calidad (te lo contaré más adelante).
4. Ecodiseño para el máximo aprovechamiento
El ‘ecodiseño’ o diseño sostenible se refiere, a grandes rasgos, al diseño y composición de patrones y accesorios teniendo en cuenta que se pueda aprovechar al máximo el tejido o material, evitando desperdicios.
A esto se suma la producción de diseñadores locales que emplean materia prima de la zona. Se reduce la contaminación por transporte, los desechos son menores… ¡Todo son ventajas! Además, de esta manera potenciaremos la economía del país, algo que nos beneficia a todos. También en este sentido es interesante optar por productos que hayan tenido en cuenta la huella de carbono que genera su negocio y hayan intentado minimizarla el máximo posible. Una solución es la producción y comercio local frente a la deslocalización.
En el ámbito del ecodiseño no podemos olvidar la necesidad de un packaging reciclable y sin plástico: Cada vez tenemos más interiorizado que debemos eliminar los plásticos del packaging de los productos en todas nuestras compras, puesto que todo elemento de un solo uso genera residuos y por tanto contamina.
5. ¿Muy bajo precio? No te fíes… Y busca los sellos de moda sostenible
El equilibrio entre lo que cuesta un producto y su calidad debe existir para poder cumplir todos los puntos anteriores de comercio justo con materiales duraderos y sostenibles. Si una prenda o un accesorio es muy barato… ¿Cómo será posible que los trabajadores y trabajadoras reciban un sueldo digno? ¿Cómo nos aseguraremos de que tiene una calidad adecuada? Para ello existen las certificaciones y etiquetado: en moda buscaremos prendas con certificado GOTS o al menos el sello Oeko Tex. En productos de madera buscaremos el sello de Madera Justa, etc. Puede además que en cada país los sellos varíen, ¡Infórmate!
Una última clave… La sostenibilidad al cien por cien no existe. Lo más sostenible es ser conscientes de lo que compramos. No te agobies porque en tu armario no haya prendas de algodón orgánico, unos vaqueros reciclados o una mochila de cáñamo.
Vestir sostenible es, sobre todo, comprar de forma responsable. Reducir el consumo es la clave para que el cambio sea posible.
Por lo tanto si nos aseguramos de que cumplimos estos tres puntos:
- Consumimos menos y sólo lo que sabemos con certeza que nos va a satisfacer a corto y largo plazo
- Compramos ético y ecológico (¡Recuerda los sellos de certificación!)
- Apostamos por la calidad frente a la cantidad
Te aseguramos que estarás en el camino correcto hacia la sostenibilidad. Ahora es tu turno, ¿Apostarías por la moda sostenible? ¿Qué crees que podemos mejorar entre todos para ser más responsables en nuestro consumo?
¡Comparte tu opinión en los comentarios!